Konrad Lorenz

 Necesitamos pensadores. Personas responsables y que nos hagan pensar. Y que ocupen el lugar injustificado de Belén Esteban, cambiando la estulticia de ella por sabios consejos para salir de la crisis que la ridícula ex del torero va alimentando con sus estupideces. Y no hace falta remontarse a los principios del pensamiento humano. Uno de esos pensadores es Konrad Lorenz.
 Nacido en la capital austríaca, en el Otoño de 1903, pronto dió muestras de interesarse por el mundo de la zoología, pero para contentar a su padre estudió Medicina en la Universidad de Columbia, en los Estados Unidos. Considerado uno de los padres de la etología- estudio del comportamiento humano(en su caso, paradojicamente,  a través de la observación del animal-En la universidad de su ciudad natal consiguió el doctorado en zoología.Su dedicación a la etología lo llevo a dirigir el Instituto Max Planck de Zoología en Siewiessen (Alemania)), desde donde ganó el Nobel de Medicina. Murió en Altenberg (Austria) en 1989.
 Durante su adolescencia se inició un interés y un estudio por el comportamiento animal y su reflejo en el humano. En su etapa universitaria quiso estudiar zoología, interesándose por el comparativismo paleontológico, a través del cual llegó a la conclusión de que el estudio comparativo de estructuras orgánicas es aplicable a la psicología.
 En 1941 es reclutado a la fuerza, siendo destinado a un hospital militar como psiquiatra, estudiando casos de polineuritismo o la llamada ¨fatiga de combate¨.Enemigo de los totalitarismos y su ideología determinista, no tuvo mas remedio que sufrirlo dos veces- el nazismo y el marxismo. Aprovechó esta experiencia para debatir, con sus colegas soviéticos, sobre la libertad y su falta. Fué excarcelado al no encontrarle culpable- no lo era- de crimenes nazis. En ese momento el Instituto de Bristol pretendió que ocupara una cátedraóbjetivo no conseguido pués Lorenz se decidió por su "Alma Mater¨, el Max Planck´de la mano de
Von Fritsch
 A finales de los 40 venció, en un debate sobre el comportamiento humano, organizado por el Max PPlanck al francés Grassé y a su mecanicismo genético.
 Su principal aportación al humanismo es el estudio de la neurosis colectiva, creada y manipulada por las dictaduras, y la reivindicación de la reflexión crítica como el método que nos hace libres.
sus obras más importantes son:
Ël compañero en el medio ambiente de las aves (1935)
Hablaba con los peces, las bestias y los pájaros (1948)
El anillo del Rey Salomón (1950)
El hombre encontró al perro (1950)
Sobre la agresión (1966)
La Otra Cara del Espejo (1973)
Fundamentos de Etología (1982)
La decadencia del hombre (1983)
Estoy aquí ¿Donde estás tú? (1988)