Marduk

 Hijo de Ea y Damkina. Posee doble esencia, divina y humana. Su inteligencia cuadruplica la humana. Es el líder de los dioses babilonios, representa la vida, la civilización y el progreso. Crea los vientos y las tormentas.
 Nombrado defensor por la Asamblea de Dioses, le otorgan el poder supremo. Vence  a Tiamat y a Kingu, enviados por los dioses primordiales contra él. Con la mitad del cadáver de Kingu hace la bóveda celeste y con la otra hace la Tierra en la que abre el Tigris y el Eufrates. Después crea "una red de sangre, una osamenta para producir una especie de seres cuyo nombre será hombres". Con la sangre de Kingu crea la humanidad. Es el responsable del orden universal. Nibiru (Jùpiter) es su "estrella".